• La ordenanza contempla multas que oscilan entre los 300 y los 6.000 euros
La brigada municipal anti-pintadas ha conseguido, desde su creación en diciembre de 2010, reducir el número de grafitis incontrolados hasta en un 40% gracias al trabajo que realiza la cuadrilla en todo el municipio con la ayuda de un equipamiento compuesto por dos vehículos especiales. Cada uno de ellos está provisto de material anti pintadas y 450 litros de agua.
Según los datos recabados por la Concejalía de Medio Ambiente, Jardines y Limpieza, en 2011 la brigada realizó 7.000 intervenciones para atender las peticiones de los ciudadanos, que se canalizan a través de los correos electrónicos habilitados por el Consistorio.
Objetivo: grafitis cero
Estas labores se encuentran reguladas por la ordenanza municipal contra actos incívicos y vandálicos que se aprobó en 2008. El reglamento prohíbe expresamente la realización de grafismos o pintadas sobre cualquier elemento del espacio público, así como en el interior o el exterior de equipamientos, infraestructuras, instalaciones o elementos de un servicio público.
También están incluidos los vehículos de transporte público, mobiliario urbano, cierres de obras, espacios publicitarios, monumentos, estatuas, árboles, jardines, fachadas de edificios, construcciones, calzadas, aceras y vías públicas en general.
Las personas que son “pilladas” in fraganti por la policía realizando este tipo de dibujos pueden ser sancionadas con cantidades que oscilan entre los 300 y los 6.000 euros.
El municipio se ha dividido en dos mitades para facilitar la organización del servicio que se presta un día a la semana en cada una de ellas, saneando las fachadas que dan a las vías públicas y que incluye colegios, edificios municipales, bancos, parques, puertas de garajes, etc.
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